Bugatti Tourbillon, tan rápido como un misil y tan preciso como un reloj suizo
Su motor de 1.800 CV lo propulsa de 0 a 100 km/h en dos segundos y lo lleva hasta los 444 km/h
El nuevo Bugatti Tourbillon 2025 no es simplemente una evolución del Chiron; es una revolución total. Este hiperdeportivo redefine las expectativas con un chasis monocasco completamente nuevo, una suspensión innovadora y un impresionante motor V16 electrificado que juntos a otros motores eléctricos generan la asombrosa cifra de 1.800 CV.
El corazón del Tourbillon es su motor V16 de 8.3 litros, desarrollado en colaboración con Cosworth. Este motor atmosférico, sin turboalimentación, ofrece una potencia de 1.000 CV y alcanza unas impresionantes 9.000 rpm. Pese a su tamaño, pesa solo 252 kilos, demostrando una ingeniería sin igual.
Este motor V16 no solo aporta potencia sino también un par motor de 900 Nm. Sin embargo, esto es solo la mitad de la historia. El Tourbillon también cuenta con asistencia eléctrica proporcionada por tres motores: dos en el eje delantero y uno en el trasero, que suman 800 CV adicionales. En conjunto, estos motores permiten que el Tourbillon ofrezca una potencia combinada de 1.800 CV.
Alimentados por una batería de 25 kWh, los motores eléctricos junto al de combustión propulsan al Tourbillon de 0 a 100 km/h en solo 2 segundos. Pero esto no es todo. Este vehículo alcanza los 200 km/h en apenas 5 segundos y llega a los 300 km/h en tan solo 10 segundos. Con una velocidad máxima de 380 km/h que puede incrementarse a 444 km/h usando la llave especial Speed Key, el Tourbillon es un titán de la velocidad.
Diseño artesanal
Cada superficie del Bugatti Tourbillon ha sido diseñada para maximizar la eficiencia aerodinámica y térmica, permitiéndole superar los 400 km/h. Su diseño se inspira en elementos históricos de Bugatti, como la parrilla de herradura, la línea Bugatti, la cresta central y la división de color dual. Además, el difusor trasero, que se eleva en un ángulo perfecto, mantiene el coche en equilibrio y mejora la estabilidad.
El interior del Tourbillon está diseñado para resistir el paso del tiempo. En lugar de depender de pantallas digitales que pueden volverse obsoletas, Bugatti ha optado por una experiencia analógica inspirada en la alta relojería suiza. El cuadro de instrumentos, creado con la precisión de un reloj suizo, está compuesto por más de 600 piezas, incluyendo titanio, zafiro y rubíes, y es visible a través de una consola central de cristal. Pero lo más curioso es que forma parte de una pieza fija sobre la que rueda a su alrededor el volante creando un movimiento hipnótico.
El Tourbillon no solo es un coche hermoso por fuera, sino también una obra maestra tecnológica por dentro. Su chasis de carbono de última generación y su suspensión multi-link forjada en aluminio reducen el peso total y mejoran la rigidez. Los frenos de carbocerámica y el avanzado sistema de frenado por cable aseguran una parada segura y eficaz.
El coche presenta asientos fijos para reducir peso y optimizar la postura de conducción, mientras que el pedalier ajustable eléctricamente garantiza comodidad para conductores de cualquier tamaño. Un sistema de audio avanzado utiliza excitadores en los paneles interiores para ofrecer un sonido envolvente sin necesidad de altavoces tradicionales, reduciendo aún más el peso del vehículo.
Máxima exclusividad
El Bugatti Tourbillon no es solo una proeza de la ingeniería actual, sino una apuesta hacia el futuro. Con una producción limitada a 250 unidades y un precio inicial de 3.8 millones de euros, cada Tourbillon será ensamblado a mano en el Atelier Bugatti en Molsheim, asegurando que cada coche sea una obra de arte única.
El Bugatti Tourbillon 2025 establece un nuevo estándar en el mundo de los hiperdeportivos, combinando potencia, tecnología y diseño en un vehículo incomparable. La leyenda de Bugatti continúa, más fuerte y rápida que nunca.