Polestar entra en el segmento SUV por todo lo alto con el Polestar 3
El primer SUV de Polestar llega con 517 CV de potencia y una de las baterías más grandes para hasta 610 kilómetros de autonomía.
Polestar, la marca de vehículos electrificados premium de alto rendimiento del grupo Geely (Volvo, Lynk & Co...), sigue con su sólido plan de crecimiento a través de vehículos que destacan sobre todo por tres cosas: el diseño, el rendimiento y la eficiencia. Su andadura en el mercado automovilístico empezó con el Polestar 1, una berlina híbrida enchufable que sentó las bases de la compañía. Después, el Polestar 2, otra berlina, esta vez 100% eléctrica, convertía de facto a la marca en una firma únicamente de coches eléctricos. Ahora, el Polestar 3 significa la entrada en el segmento más popular del mercado, el de los SUV, y lo hace poniendo toda la carne en el asador.
La primera gran muestra de fuerza del Polestar 3 está en su propulsión. Fiel a su esencia de firma de altas prestaciones, el modelo base dispondrá de dos motores, uno en cada eje, para 483 CV de potencia y 840 Nm de par máximo, que ascenderán hasta los 517 CV y 910 Nm de par máximo con el paquete Performance opcional. Estos motores se alimentarán de una batería de 111 kWh de capacidad, de las más capaces del mercado, firmada por CATL y que le aporta hasta 610 kilómetros de autonomía, 560 kilómetros si equipamos el paquete Performance. La batería puede cargarse en corriente continua con una potencia de hasta 250 kW, pudiendo recuperar hasta el 80% de su carga en 30 minutos.
EL MINIMALISMO POR MANDATO
El Polestar 3 es un todocamino grande, de 4,90 metros de altura, 1,61 metros de alto y 2,12 metros de ancho, que recoge la herencia dejada por los dos coches que llegaron antes que él para mostrarse como un vehículo de aspecto elegante y minimalista -santo y seña de la marca- pero también imponente. Destacan los grupos ópticos Dual Blade y el alerón del capó, que influirá positivamente en su aerodinámica, clave para maximizar su autonomía. Sus llantas, de 21 pulgadas de serie o de 22 pulgadas con paquete Performance, serán lo más llamativo de un perfil que fluye hasta una zaga donde los grupos ópticos -finísimos- quedan unidos a través de una franja iluminada que, además, divide la trasera en dos secciones bien diferenciadas. El maletero, de 484 litros, no es de los más grandes del segmento.
En el interior, Polestar no iba a romper esa apuesta por el minimalismo, pero tampoco iba a dejar de lado su vocación premium, casi de lujo, pero sostenible. De este modo, distribuye los puntos de atención en dos pantallas, una de nueve pulgadas para el cuadro de instrumentos y otra de 14,5 pulgadas en disposición vertical para el sistema de infoentretenimiento desarrollado por Qualcomm Technologies y dedicado a ofrecer “experiencias inmersivas, gráficos en alta definición, un sonido premium de calidad y una inédita conectividad en el vehículo” a través del sistema operativo Android Automotive OS. Es, como era de esperar, compatible con los teléfonos móviles más habituales. La sensación premium la aportará una selección de materiales blandos a partir de tela ecológica, piel con certificado de protección animal y lana de procedencia comprobada.
Polestar, dentro del Volvo Group, tiene la misma obsesión por la seguridad que Volvo, por lo que el Polestar 3 incorporará los últimos desarrollos de la firma sueca que equipará también el futuro Volvo EX90, entre ellos los sensores que detectan si el conductor se ‘deja’ a alguien dentro del coche al aparcar para garantizar su seguridad, o los cinco radares, las cinco cámaras externas y los doce sensores que generan una imagen precisa de los alrededores del coche para controlar sus sistemas de seguridad activa, con las funciones más habituales como el control de crucero adaptativo o la alerta de cambio involuntario de carril, entre otras.
DESDE 92.900 EUROS
El Polestar 3 llegará al mercado a mediados del año que viene para posicionarse como un serio rival para coches como el BMW iX, el Audi e-tron o el Tesla Model Y. Se producirá, como todos los Polestar, en China, en la planta de Geely en Chengdú, y su precio partirá desde los 92.900 euros, 99.500 euros si se suma el paquete Performance. Las primeras entregas están previstas para el tercer trimestre del año que viene.