Renault 5: herencia, pasión y tecnología
La marca del rombo estrena el nuevo R5, con dos propuestas de batería (40 y 52 kWh), tres potencias con 95, 120 y 150 CV, excelente dinamismo y un precio que arranca en los 24.990 euros
Renault vuelve a echar mano de su herencia para lanzar al mercado un nuevo modelo. Sí, nuevo. Llega el Renault 5, un mito transformado y adaptado a los tiempos que corren (eléctricos, dicen). La marca del rombo ha tomado la referencia de su superventas lanzado en 1972 (se vendió hasta 1996) y presenta un coche 100% eléctrico con un diseño rompedor.
Su diseño evoca su pasado glorioso. La firma lumínica es esencial para ser reconocido, con unas luces diurnas colocadas en la posición de los antiniebla del R5 Turbo, modelo del que también se toma inspiración para el diseño del techo.
Detalle sobre el capó: donde antaño presidía una rejilla de ventilación aparece ahora un indicador luminoso con el número 5, que se va apagando en franjas conforme se consume la batería. La trasera también es reconocible y de aspecto dinámico.
En el interior encontramos un estilo moderno, marcado por un salpicadero en el que destacan sus dos pantallas de 10,25 pulgadas, una frente al conductor para la instrumentación y otra a la derecha horizontal para la gestión multimedia. El sistema OpenR Link incorpora entorno Google y Chat GPT 3.5, apoyando sus funcionalidades en un simpático personaje ‘Reno’ que aparece cuando se le llama por su nombre y atiende a nuestras consultas e instrucciones vocales.
El volante es algo grande y grueso. El cambio está justo por detrás y encima de los mandos del limpiaparabrisas, muy en línea con la moda de los nuevos eléctricos del mercado. No dispone de posición de ‘P’ de ‘parking’. Para detenerlo hay que ponerlo en ‘neutro’ (N) y pulsar el botón del freno de mano ubicado bajo la consola central y el ‘piano’ de la climatización.
Mecánicamente dispone de dos versiones, una con la batería grande, de 52 kWh que ofrece una autonomía de 410 kilómetros, aproximadamente y otra con la batería pequeña de 40 kWh la autonomía se sitúa ligeramente por encima de los 312 kilómetros.
Para recargar dispone de opciones de 11 kW en trifásico doméstico y de hasta 100 kW en cargador rápido. También destaca la posibilidad de recargar pequeños electrodomésticos gracias a su función V2L (siempre que la batería esté por encima del 20% de capacidad). Del mismo modo puede actuar como almacenador y distribuidor de energía con el sistema V2G. Hay tres versiones, con 95 y 120 CV asociadas éstas a la batería de 40 kWh y con 150 CV y batería de 52 kWh .
Su plataforma específica, AmpR Small, le permite disponer de un bajo centro de gravedad (ayudado por la posición de la batería) y un peso inferior a los 1.449 kilos. Eso, unido a su eje trasero Multilink de desarrollo específico (propio de segmentos superiores), contribuye a que se comporte como un verdadero superserie.
La gama arranca en los 24.990 euros para la versión más básica con batería de 40 kWh. Tiene acabados Five y EVolution en ese tramo, mientras que con la batería de 52 kWh se ofrecerá con acabados Techno (32.900 euros) e Iconic 5 (34.900 euros).