El país en el que es más caro tener un permiso de conducir que comprarte un coche
En Singapur ser capaz de conducir es considerado todo un privilegio, ya que el permiso para poder circular tiene un precio con el que podrías comprarte un Ford Mustang GT
- En Singapur tener un certificado para poder conducir es realmente caro
Obtener el carnet de conducir es algo necesario para muchas personas, además de una forma de tener mayor autonomía. Sin embargo, los precios para obtenerlo cada vez se encarecen más, aunque en ningún caso será como en Singapur.
En el país del sudeste asiático conducir está limitado a personas con verdaderos recursos económicos. De hecho, lo realmente caro no es el carnet de conducir en sí mismo, sino un certificado que te da derecho a circular. Algo más o menos parecido al Permiso de Circulación de la DGT, un documento que debes llevar obligatoriamente en el vehículo.
Singapur: el país donde conducir está reservado a los más ricos
El caso de Singapur es muy curioso y hay pocos estados que utilicen su misma política de circulación. De hecho, llevan desde el año 1990 con esta medida para frenar la contaminación y reducir los atascos, una ley que ha dado sus frutos, pero por limitar tantísimo la conducción a los ciudadanos singapurenses.
La medida se trata de implantar una especie de permiso que te da derecho a poder tener un vehículo, al menos durante cinco o diez años. ¿El problema? Dicho documento, con el nombre de Certificado de Derecho de Circulación, tiene un coste muy alto que puede alcanzar los 80.000 dólares, siendo más de 75.000 euros al cambio. Es más, ese precio puede ascender dependiendo de la cilindrada del vehículo.
Unos precios totalmente locos, aunque también reflejan otra realidad del país: el transporte público es altamente eficiente. Dado que en Singapur estos medios de transporte tienen una relevancia enorme se ha logrado crear una red barata y funcional. Ahora bien, las motos son mucho más económicas que los coches, por lo que algunos optan por este medio, ya que su CDC cuesta unos 7.500 euros.
En cuanto a datos, el gobierno de Singapur logró recaudar más de 4.000 millones de dólares solo con la venta de dichos certificados en el año 2024. Además, no son pocas familias que dudan muchísimo de si adquirir un automóvil o no.
Por ejemplo, una pareja de casados singapurenses llegó a pagar 58.000 dólares por un Hyundai Avante del año 2022 junto al permiso. Una cantidad que deja claro que el mercado de ocasión tampoco es una opción viable.
Todo esto ha traído consigo una nueva forma de ver los coches y conducir: estatus social. Aquellos que pueden poseer un coche y pagarse el certificado para poder circular, son vistos como el que va por la calle con un Rolex de más de 60.000 euros. De hecho, los coches allí son entendidos de esta forma, porque el mercado está totalmente loco.
La realidad es que Singapur tiene unos datos en cuanto a vehículos muy impactantes, porque por cada 100 habitantes solo hay 13 coches de pasajeros. Unas cifras que certifican que Singapur es uno de los países más caros para tener un coche y poder conducir.