No corras el riesgo: dejar una botella de agua en tu coche puede acabar muy mal

Muchas personas (y más en verano) llevan una botella de agua en su coche. En la mayoría de ocasiones, se utilizan para beber algo durante los viajes, pero muchas veces nos las dejamos medio vacías en el suelo o en los asientos una vez llegamos a nuestro destino. Si es tu caso, deberías tener cuidado con lo que puede pasar si te descuidas, te lo contamos a continuación.

El robo de vehículos es una de las grandes preocupaciones de los españoles, sobre todo de aquellos que poseen una motocicleta. Y es que nadie quiere llegar al sitio donde había aparcado y encontrarse con que su vehículo ya no está. Sin embargo, el robo del propio vehículo no es lo único que debe preocuparte, sino también de todo aquello que lleves dentro.

Por lo general, siempre se recomienda que no lleves cosas de valor en tu vehículo, y mucho menos que las dejes a la vista. Cualquier objeto a la vista dentro de un coche o furgoneta puede ser un reclamo para aquellos que tratan de robar. Lo más recomendable es que la zona de asientos traseros y delanteros se encuentre despejada y cualquier cosa esté colocada o en el maletero o en su defecto en la guantera.

Otra forma de evitar que los mirones se planteen robarte cualquier objeto de tu vehículo es el tintado de lunas. Se trata de una práctica que sólo puedes llevar a cabo en los cristales traseros de tu vehículo y siempre debes hacerlo en un lugar homologado, para evitarte problemas con la Guardia Civil o incluso posibles multas.

El tintado de lunas no sólo le da un toque distinto a tu vehículo, sino que evita que los objetos que estén en la parte trasera del coche se vean a simple vista y también que los rayos de sol entren con la misma fuerza que lo hacen a través de un cristal transparente. Si eres de los que suele dejar alguna que otra cosa en la parte de atrás sin darse cuenta, estos son tus cristales.

Sin embargo, la botella de agua es uno de esos objetos que no deberías dejar en tu coche cuando lo aparcas, No porque te la puedan robar, sino por lo que puede pasar en tu coche. Independientemente del sabor que pueda tener el agua si la dejas mucho tiempo, que tampoco será agradable, lo principal es que puede producirse un pequeño incendio.

A través del efecto lupa, el sol podría quemar la tapicería o cualquier otro elemento y causarte un disgusto de los grandes. Además, en caso de accidente los objetos sueltos pueden volar por el vehículo, y una botella llena de agua podría causarte lesiones aunque no lo creas.