¿Tienes un coche automático? Este es el mantenimiento que necesita
Hay dos elementos que debes vigilar para no sufrir averías
Cada vez es más común ver coches con cambio automático en las carreteras españolas, y es que la mayoría de los vehículos nuevos (sobre todo los más potentes) ya suelen prescindir del cambio manual, aunque aún puedes encontrar coches con estas características.
Independientemente del cambio que tenga tu vehículo, realizar un mantenimiento periódico conseguirá que te evites muchas averías. A continuación te contamos qué mantenimiento necesita tu coche automático.
Principales averías
Si eres de los que suele descuidar el estado del coche y se limita a realizar los mantenimientos básicos en las fechas señaladas, quizá deberías estar preocupado de las averías que pueda sufrir tu coche. Es recomendable que revises tu vehículo no sólo antes y después de hacer un viaje, sino también cuando lleva bastante tiempo parado o simplemente cada cierto tiempo.
Las averías más comunes en los vehículos de particulares suelen tener que ver con la falta de revisiones de elementos básicos, como es el nivel de líquidos, el estado de la batería o incluso el de los neumáticos y frenos. En muchas ocasiones echar un pequeño vistazo de vez en cuando te evitará males mayores.
En los automáticos, en cambio, uno de los principales problemas suele derivar de la caja de cambios cuando se va a aparcar. Aquí puedes consultar cómo aparcar tu coche automático sin hacer que sufra una avería.
El mantenimiento del coche automático
Las cajas de cambio de los coches automáticos están caracterizadas por tener un aceite hidráulico llamado ATF, que lubrica los engranajes y también ayuda a realizar los cambios de marcha. El principal mantenimiento que tendrás que realizar es el del cambio de este aceite, así como el del filtro de aceite. Te ahorrará muchos problemas.
Lo normal es que lo hagas más o menos cada 100.000 kilómetros pero puedes encontrar los detalles en las recomendaciones del fabricante, ya que puede variar en cada coche. Si el aceite se ensuciase de más podría dejar de lubricar todo lo bien que debería a la caja de cambios y estropear las piezas de su interior.
Por otro lado, otra de las cosas a revisar son las pastillas de freno, ya que, al no contar con el freno motor como en un coche manual, éstas suelen sufrir algo más. El cambio de estas pastillas es sencillo y no tiene ninguna diferencia con el de un coche con marchas, y se puede realizar en cualquier taller sin problema.
Independientemente de estas dos recomendaciones, debes revisar el resto de cosas de tu vehículo con normalidad, como los neumáticos y su desgaste, el estado de los parabrisas e incluso el interior, para asegurarte de que todo está en orden.