Tu coche, tu mejor terapia: un estudio sugiere que conducir podría reducir los riesgos de sufrir Alzheimer
Un estudio científico de la Universidad de Harvard explica que las habilidades que empleamos a la hora de conducir reducen las posibilidades de tener Alzheimer
¿Y si el simple acto de conducir pudiera convertirse en un escudo contra el Alzheimer? Un nuevo estudio científico sugiere que mantenerse al volante no solo ayuda a desplazarse, sino que también podría ser clave para mantener el cerebro activo y saludable.
La investigación ha descubierto que las habilidades implicadas en la conducción, como la toma de decisiones, la memoria espacial y la coordinación, podrían reducir el riesgo de desarrollar Alzheimer. Pero, ¿qué hay detrás de esta sorprendente conexión? Te contamos los detalles de este hallazgo que podría cambiar la forma en que vemos la conducción.
Conducir reduce los riesgos de sufrir Alzheimer, según el estudio de Harvard
Desde la Universidad de Harvard, en Estados Unidos, se ha publicado este estudio científico que podría cambiar tu percepción de lo que es conducir. Los resultados del estudio aseguraban que las habilidades cognitivas que se usan a la hora de ponerte al volante ayudan a reducir el riesgo de contraer este tipo de enfermedades.

Más concretamente, en el estudio se centraron en profesiones como la de taxista o conductor de ambulancia, las cuales eran menos proclives a ser afectados por el Alzheimer. La explicación que da la universidad es que este tipo de profesiones requieren una memoria espacial bastante considerable que estimulan una parte del cerebro fundamental.
Dicha zona se le conoce como Hipocampo, la cual suele ser la primera afectada por el Alzheimer. Por tanto, estimular tu cerebro conduciendo podría ser un gran entrenamiento para protegerte de esta cruda enfermedad cerebral. Además, en el estudio tuvieron en cuenta otras profesiones que conllevan pilotar o conducir, como los autobuses, aviones o barcos.
Sin embargo, estos último tenían datos peores que los taxistas y las ambulancias. De igual forma, sus posibilidades de sufrir Alzheimer eran menores también. No obstante, desde Harvard aseguran que hay algunas consideraciones que se deben tener en cuenta.
Primero, como este estudio se centró exclusivamente en profesiones que requieren conducir o pilotar, la brecha de género es amplia en según qué puesto. Por ejemplo, entre los taxistas y conductores de ambulancia la presencia de mujeres es bastante menor que en otras. Esto mismo se debe tener en consideración, porque las mujeres son más propensas a tener Alzheimer que los hombres.

Segundo, y por último, la edad media a la que se suele desarrollar el Alzheimer es a los 65 años. Sin embargo, los conductores de ambulancia y los taxistas tienen una edad media de fallecimiento de 67,8 y 64,2 años, respectivamente. Es decir, si este tipo de trabajadores hubieran vivido más años podría haberse dado el caso de tener Alzheimer.
Sea como sea, la realidad del estudio de Harvard es que conducir implica una serie de habilidades cerebrales que pueden estimular este órgano de nuestro cuerpo. Ya no solo es que te sirva para desplazarte, sino que a la larga lo mismo te ayuda a reducir el riesgo de tener Alzheimer.