Carlos Tavares dimite como CEO del grupo automovilístico Stellantis
El directivo portugués adelanta un año su salida del consorcio y deja el mando de la compañía de forma interina en manos de un comité ejecutivo liderado por John Elkann
No ha querido esperar a que lleguen los primeros meses de 2026 y se ha adelantado un año. Carlos Tavares ha decidido presentar su dimisión como máximo responsable del grupo automovilístico Stellantis, renuncia que la compañía ha aceptado sin pestañear. La dimisión, con efecto inmediato, llega después de que en el los últimos meses el ambiente en el seno de la empresa se fuese enrareciendo, provocado básicamente por los malos resultados del grupo en Estados Unidos.
Tavares, máximo responsable del consorcio formado por Jeep, Opel, Citroën, Peugeot, DS Automobiles, Lancia, Alfa Romeo, Leapmotor, Fiat, Abarth, Ram, Vauxhall, Dodge, Maserati, Chrysler, Leasys y Free2Move, abandona así la primera línea del sector del automóvil, dejando de ser uno de los hombres más influyentes junto al actual CEO del Grupo Renault, Luca de Meo, de quien se ha rumoreado que podría entrar en la ecuación para liderar la compañía en un futuro.
Según ha comunicado la empresa, el consejo de administración ha decidido aceptar la renuncia “de su cargo como Consejero Delegado (CEO) con efecto inmediato. El proceso de nombramiento del nuevo Consejero Delegado permanente está en marcha, gestionado por un Comité Especial del Consejo, y concluirá en el primer semestre de 2025. Hasta entonces, un nuevo Comité Ejecutivo Interino, presidido por John Elkann (actual presidente de Stellantis) que estará al frente de la compañía”.
Para no alarmar a los accionistas, Stellantis ha confirmado todos los operativos e inversiones previstas para 2024, presentados en el balance de resultados del pasado 31 de octubre. El director Senior de Stellantis, Henri de Castries, ha apuntado que “el éxito de Stellantis desde su creación se ha basado en una alineación perfecta entre los accionistas de referencia, el Consejo y el CEO. Sin embargo, en las últimas semanas han surgido diferentes puntos de vista que han llevado al Consejo y al CEO a tomar la decisión de hoy”. El batacazo en Estados Unidos y la incertidumbre de la apuesta por la electrificación en mercados como el europeo habrían acelerado la marcha de Tavares.
Arquitecto del nacimiento del grupo
El directivo portugués ha estado al frente de Stellantis desde que este consorcio automovilístico, fruto de la fusión de FCA y PSA, se pusiera en marcha a comienzos del año 2021. Ya entonces se fijó la fecha de final de su contrato en enero de 2026. Tavares, que procedía de Nissan de donde salió tras plantar cara a Carlos Ghosn, fue el artífice de una gestión de recursos drástica, draconiana, pero tremendamente eficiente. Lo que le convirtió en el responsable automovilístico de mayor calado en el sector. Entró en la dirección de PSA (Peugeot. Citroën y DS) en el año 2014 tras el rescate del grupo por parte del gobierno francés. Siempre estuvo en el ojo del huracán, sobre todo en los últimos años cuando salió a relucir su salario. En 2019, la cifra se sitió en 7,6 millones de euros.
Tras el anuncio de su marcha, el presidente de Stellantis, John Elkann, ha expresado: «Nuestro agradecimiento a Carlos por sus años de dedicación y por el papel que ha desempeñado en la creación de Stellantis, así como en las anteriores reestructuraciones de PSA y Opel, que nos han situado en la senda de convertirnos en líderes mundiales de nuestro sector. Estoy deseando trabajar con nuestro nuevo Comité Ejecutivo Interino, apoyado por todos nuestros colegas de Stellantis, mientras completamos el proceso de nombramiento de nuestro nuevo CEO. Juntos garantizaremos el despliegue continuado de la estrategia de la empresa en interés a largo plazo de Stellantis y de todas sus partes interesadas”.