Chery desembarca en Barcelona con la promesa de invertir 400 millones y crear 1.250 empleos
La automovilística china tendrá el 40% de la propiedad de la nueva compañía y EV Motors el 60%
En un acto cargado de simbolismo, la Zona Franca ha vivido hoy un día histórico con la firma del acuerdo entre la empresa acatalana Ebro-EV Motors y la china Chery para producir (primero ensamblar) vehículos en la planta instalada en Barcelona que Nissan abandonó en 2021. La llegada de Chery marca un punto de inflexión en la reindustralización de la planta de la Zona Franca.
Pedro Calef, consejero delegado de Ebro-EV Motors y Zhang Guibing vicepresidente de Chery Automobile han rubricado el acuerdo en presencia del presidente del gobierno español, Pedro Sánchez; el president de la Generalitat, Pere Aragonès; el Ministro de Industria, Jordi Hereu; el Conseller d’Empresa i Treball de la Generalitat, Roger Torrent; y representantes de la Embajada y el Consulado chino en España y de la provincia de Anhui (China), además de otras autoridades y más de un centenar de invitados.
“Haremos de Barcelona una de las principales bases de exportación de Chery a nivel mundial”. Con esta promesa llega la primera automovilística china que abre planta en Europa, tal como ha afirmado el vicepresidente de Chery, Zhang Guibing. La firma asiática desembarca en la capital catalana para reindustrializar la antigua fábrica de Nissan en Zona Franca y junto a la catalana EV Motors invertirán 400 millones de euros, entre capital propio y subvenciones públicas.
150.000 vehículos
De sus líneas de montaje empezarán a ensamblarse coches ya a finales de este mismo año, con la perspectiva de ir ganando volumen y lograr los 150.000 vehículos ensamblados a lo largo de los próximos cinco años. El nuevo proyecto, a medio plazo, dará empleo a 1.250 trabajadores, la mitad de los que empleaba antes de cerrar la factoría nipona.
“Hoy es un gran día, porque se cierra la reindustrialización de una de las fábricas que ha sido más importante durante los últimos 80 años en Catalunya”, ha valorado el president de la Generalitat, Pere Aragonès. “Estamos hablando de una industria medular para el buen funcionamiento de la economía española”, ha afirmado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Este viernes se ha producido un desfile de autoridades por una de las factorías más icónicas y con más historia de la Zona Franca.
“Recuperamos la esencia industrial de nuestro país”, ha afirmado el consejero delegado de Ebro-EV Motors, Pedro Calef. La fábrica de Zona Franca la compartirá esta compañía catalana, de nueva creación, con Chery. En la factoría ubicada en la perfieria de Barcelona se ensamblarán vehículos de la renacida marca Ebro y varios modelos de Chery, como el Omoda.
Aval salvador
Que el interés de Chery haya acabado cuajando ha salvado la reindustrialización de Nissan, que ha visto como proyectos de dudosa viabilidad han ido sobrevolando las instalaciones de Zona Franca. Inversores belgas -grupo Push- querían fabricar ‘pick ups’ de Nissan pero con motores de hidrógeno. Fabricantes estadounidenses -Ronn Motor- querían producir coches de alta gama impulsados a pilas de hidrógeno. También se barajó la posibilidad de resucitar una marca icónica del automovilismo español como Hispano Suiza para hacer coches de lujo eléctricos.
Incluso uno de los cofundadores del proyecto de electrificación de la antigua planta de Nissan se han quedado por el camino. Hace dos años y un par de semanas la gran esperanza industrial pasaba por fabricar furgonetas eléctricas para el reparto de última milla bajo el nombre de Zeroid. Joan Orús, antiguo socio de Ebro, fue su principal impulsor. Hace unas semanas vendió su participación en Ebro, en un movimiento que algunas fuentes sitúan como forzado por Chery por falta de confianza en Orús. Cuando este lideró la participación de Ebro en el PERTE varios bancos le negaron los avales por falta de garantías, lo que lastró la capacidad de financiación del proyecto. En ese momento y tras dos prórrogas especialmente habilitadas por el Gobierno, captó 48 millones de los 70 inicialmente ambicionados.
Seis modelos
Ebro ha confirmado que producirá con la plataforma de Chery dos SUV con motores PHEV (híbrido enchufable) y de combustión. Estos dos modelos se fabricarán conjutamente con el Omoda 5, que será el primer vechículo que saldrá de la planta, y el Jaecoo 7. Para más adelante llegará a versión de Omoda 5 100% eléctrico (que se presentará en el mercado tras el verano) y la pick-up de Ebro eléctrica presentada en el pasado Automobile Barcelona de 2023. Con ello, la carga de producción de la planta se basará en seis modelos antes de 2030.
La intención de Chery es acabar produciendo buena parte de los vehículos en la planta de Zona Franca. En esta primera fase se encargarán solo en ensamblar pero el propio Zhang Guibing ha confirmado que posteriormente se pretende trabajar con proveedores locales para producir a mayor escala directamente en la fábrica barcelonesa. El vicepresidente de Chery Internacional ha recordado que la compañía “apuesta por la tecnología y la globalización, y Barcelona será una de las mayores bases exportadoras de Chery a nivel mundial”.