Las ventas de Tesla en el mundo caen por primera vez en una década

Elon Musk no estará muy contento, aunque tampoco vayan ustedes a creer que llevará un cabreo monumental. Los resultados de las ventas de Tesla se colocaron en 2024 en los 1,79 millones de vehículos, una cifra altamente respetable pero inferior a las previsiones que se habían fijado ya que representa un 1,1% menos que en 2023. La lentitud en la demanda de los coches eléctricos, una vez superada la euforia inicial, está poniendo al mercado en su sitio, y ese es uno de los problemas a los que se está enfrentrando Tesla (también).

Las ventas del Model 3 y Model Y de Tesla representaron 471.930 entregas en el cuarto trimestre. Los otros modelos como Model X, S y Cybertruck, registraron 23.640 entregas. Con estas cifras se quedó un poco lejos, teniendo en cuenta que sus mercados principales son Estados Unidos y China

Y es que la compañía ha atravesado un 2024 complejo. Según apuntan en Bloomberg, Tesla entregó 495.570 vehículos, por debajo de los 512.277 previstos por los analistas. Necesitaba vender casi 515.000 vehículos en el período para cumplir su objetivo de un crecimiento “leve” en el año.

Esta ligera caída tuvo su reflejo en la Bolsa de Nueva York. Las acciones de Tesla cayeron el jueves tras conocerse los resultados. A las 9:32 a.m. en Nueva York, los títulos perdían un 4,5%, pagándose a 385,72 dólares la acción. Un valor que era sólido ya que en todo 2024 acumularon un alza del 63%. Al final del día las acciones habían bajado un 6%.

Como decíamos, 2024 no fue fácil para Musk y sus muchachos. Tesla sufrió un incendio provocado en su fábrica de Berlín, también enfrentó desvíos de embarques y sufrió en sus carnes la desaceleración de las ventas de vehículos eléctricos en todo el sector. Asimismo, la empresa ha dicho a los inversionistas que la demanda de sus vehículos totalmente eléctricos se encuentra entre dos grandes olas de crecimiento. En abril, el fabricante de automóviles con sede en Austin recortó más del 10% de su plantilla, incluido personal de ventas.

De cara a 2025 la compañía espera crecer. Dejando a un lado la vinculación política de Musk con Donald Trump y lo que puede suponer para los planes de Tesla, el magnate está convencido de que la compañía experimentará un crecimiento de entre el 20% y el 30% este año, impulsado en parte por un vehículo más asequible que se espera que se presente en el primer semestre y por la tecnología autónoma de la compañía. La cercanía de Trump le puede beneficiar. Se espera que flexibilice las normas federales sobre vehículos autónomos, lo que podría beneficiar a Tesla y a sus ambiciones de un robotaxi.