Volkswagen retrasará los planes de Cariad, su división de software
Oliver Blume, nuevo CEO del Grupo Volkswagen, sigue revisando los planes e inversiones impulsadas por su predecesor, Herbert Diess.
Volkswagen detallará su estrategia de software el próximo 15 de diciembre. Tras la salida de Herbert Diess, exCEO del Grupo Volkswagen, a raíz, entre otros temas, de los retrasos y los problemas con Cariad, su división de software, Oliver Blume, su sucesor, ha tenido que revisar las inversiones y definir un nuevo marco de actuación adaptado a la realidad. Neomotor ya adelantó que Blume está analizando todas las estrategias de futuro del grupo y pronto veremos qué dirección tomará los próximos años.
Uno de los principales escollos con Cariad es la enorme inversión que Diess hizo en la unidad sin recoger los frutos deseados. Según explica la agencia Reuters, citando una fuente importante en el grupo no identificada, una de las prioridades de Blume ha sido “estudiar el estado del área de software”. “Una vez tienes el software, lo tienes que integrar en los productos y ambos deben encajar. Hay muchas cosas que no se han hecho en años que ahora deben decidirse muy rápido”, añade la fuente.
Según la información de la agencia de noticias, el nuevo software, el 2.0, que debería posibilitar los sistemas de conducción autónoma de nivel cuatro y debía llegar a algunos coches en 2026, se retrasará a finales de la década, con 2028 como objetivo más optimista. Este tiempo de más servirá para mejorar y perfeccionar el software. Paralelamente, el software 1.2 para coches premium eléctricos se introducirá en coches como el Macan eléctrico o el Q6 e-tron a partir del próximo año. Hasta la llegada de los nuevos software se mantendrá el 1.1 actual.
Proyectos cancelados
Como confirmó este portal, Volkswagen está considerando seriamente cancelar o retrasar el proyecto Trinity, sobre el cual se iban a desarrollar varios eléctricos con altas capacidades de conducción autónoma y basados sobre una nueva plataforma, la SSP, que llegarían a partir de 2026. Este proyecto contaba con una inversión de 2.000 millones de euros y contemplaba la construcción de una nueva fábrica cerca de Wolfsburg para la producción de estos coches eléctricos, que además contaban con el aliciente de sistemas de conducción autónoma del nivel cuatro.
De momento, Blume se decantaría por retrasar su llegada hasta, como mínimo, 2030 y estaría sopesando cancelar la construcción de la nueva planta porque considera que la planta de Wolfsburg tendría capacidad suficiente para producir estos vehículos. De momento, según ha confirmado recientemente Thomas Schäfer, director de la marca Volkswagen, al rotativo Wolfsburger Allgemeine Zeitung, “¿llegará Trinity? Sí. Si hay también una nueva planta es otra cuestión”. “Las opciones están al 50-50”, ha admitido.
Peor suerte correrá el proyecto Artemis de Audi, que nació con el objetivo de desarrollar un eléctrico premium con nivel cuatro de autonomía para 2024. Según adelanta Automobilwoche, el proyecto se cancelaría ante los nuevos planes para la división de software ya que, según considera el grupo, apenas se han realizado avances desde su anuncio.
La nueva dirección de Volkswagen, con Blume al mando, ha tenido que trabajar duro durante los últimos meses para dictaminar el estado actual del consorcio y orientar su futuro tras definir algunos de los planes de Herbert Diess como “surreales”.