Salón de Múnich: BYD Seal, la gran apuesta china

En un mar de emociones. Así se adentran desde BYD en el mercado Premium europeo ofreciendo un modelo de altas prestaciones y repleto de tecnología, listo para plantar cara a los más aguerridos del lugar. Bajo la filosofía de diseño ‘Ocean Aesthetics’ llega al mercado español el BYD Seal.

La marca china, líder en vehículos electrificados en el mundo (híbridos y eléctricos puros), quiere posicionarse como la referencia en todos los segmentos. Dominan la tecnología de la electrificación, no en vano uno de cada cinco smartphones del mundo llevan sistema de BYD electronics y en el caso de los Ipads es uno de cada dos.

El nuevo BYD Seal es el quinto modelo de la marca en nuestro país, que actualmente comercializa Atto 3, Tang, Han y Dolphin, por lo que tocará todos los palos de la baraja. Llegará al mercado en noviembre con un precio que irá (según si es tracción total o solo trasera) entre 46.990 y 48.990 euros (sin contar las ayudas públicas), apuntando directamente a estrellas del mercado como el Kia EV6, Hyundai Ioniq 6, BMW i4, Tesla Model 3 y Volkswagen ID7.

De diseño atrevido, moderno y con líneas muy deportivas, el Seal destaca por ofrecer lo mejor de la electrificación pura y una imagen deportiva. Su coeficiente aerodinámico de 0,219 CX es de los mejores del mercado. Sus dimensiones están en la línea del segmento de las berlinas, con 4,80 metros de largo, 1,87 de ancho y 1,46 de alto, ofreciendo una distancia entre ejes de 2,92 metros. Su maletero tiene 400 litros de capacidad, con un maletero delantero adicional de 53 litros que se encuentra bajo el capó.

Está montado sobre la plataforma e-Platform 3.0 con la tecnología Cell-to-Body que integra la batería como parte del propio chasis. Emplea una batería ‘Blade Battery’, de desarrollo propio, que prescinde de níquel y cobalto. Está compuesta de litio hierro fosfato (LFP) como material catódico, lo que según la marca implica ofrecer un mayor nivel de seguridad y durabilidad que las baterías de iones de litio convencionales, mejorando la resistencia a las temperaturas extremas.

Se ofrece con dos versiones, ambas con la misma batería de 82,5 kWh, que ofrece potencias de 230 kW (313 CV) y 390 kW (530 CV), bien sea tracción trasera o tracción total. En ambos casos las prestaciones son de alto nivel. La aceleración de 5,8 segundos de 0 a 100 km/h del modelo ‘pequeño’ no tiene nada que ver con los 3,8 segundos del 4x4, de ahí que la marca haya diferenciado al modelo ‘grande’ añadiendo el número 3.8 en la parte trasera.

La autonomía que refiere la marca es de 570 kilómetros en el modelo Desing (el 4x2) y de 520 kilómetros en el Excelence (4x4), anunciando 690 y 600 kilómetros respectivamente en conducción urbana, golpeando de lleno a los competidores. De cara al primer semestre de 2024, BYD anuncia que llegará una variante equipada con una batería más pequeña, de 61,6 kWh (paralelamente a la introducción de una de 45 kWh para el Dolphin).

El BYD Seal ofrece una potencia máxima de recarga de 11 kW en corriente alterna (toma doméstica) y 150 kW en continua, pudiendo ‘teóricamente’ pasar del 30% al 80% de capacidad en tan solo 26 minutos. También ofrece la tecnología V2L, que permite cargar y dar corriente a aparatos eléctricos pequeños (que tengan una potencia de hasta 3 kW).

En su interior ofrece una imagen muy moderna. El salpicadero destaca por las dos pantallas digitales, una frente al conductor de 10,25 pulgadas y otra de 15,6 pulgadas en la consola central que es giratoria, sobre su eje, pudiendo elegir a voluntad una visualización vertical o bien horizontal.

La palanca de cambios es minimalista, de cristal y va en la zona central. Ofrece doble cargador inalámbrico en la consola central. También dispone de sistema de sonido con 12 altavoces y un techo panorámico de 1,3 metros cuadrados.