Los 5 secretos mejor guardados que todos los conductores deberían conocer para evitar averías y accidentes
Un análisis de Carly muestra que el 35% de los coches de una muestra de 6.8 millones de coches presenta averías críticas
Tener un coche es una responsabilidad grande, pero a todos le entran los sudores fríos cuando este tiene una avería. De hecho, dependiendo de los años que tenga tu coche las averías pueden ser más frecuentes en ciertas zonas concretas.
Por ello, en Carly, empresa líder en tecnología automotriz, han realizado un estudio que ha dejado datos muy impactantes, ya que un tercio de los vehículos que están en circulación, concretamente un 35%, presentan averías graves que pueden causar muchos accidentes.
De esta forma, de todo el estudio se revelan las 5 advertencias que todo conductor debería conocer, pero muy pocos entienden. Se tratan de unos secretos que están bien guardados y se suelen pasar por alto, marcando la gran diferencia en la seguridad.
1. El indicador de presión de aceite tiene diferentes significados dependiendo del color
La luz del tablero que indica la presión del aceite puede ser de diferentes colores, ya que en algunos vehículos es amarilla y en otros gris. Sin embargo, cuando es roja podría ser un simple aviso de servicio o, en el peor de los casos, de un fallo grave de pérdida de aceite.
Así pues, si esa luz roja está fija deberías apagar el motor lo antes posibles, ya que conducir con pérdida de aceite podría dañar gravemente el motor. La mejor recomendación es revisar el manual del vehículo para interpretar el color de la luz y su frecuencia.
2. La luz del generador en rojo no solo es de la batería
Muchos conductores no saben que la luz en rojo del generador indica fallos en la carga y no tanto en la batería en sí. Pese a que erróneamente los conductores siguen conduciendo, lo más aconsejable es detener el coche en un lugar seguro si ves esta luz. De hecho, si siguieras conduciendo podrías causar fallos en los sistemas de seguridad y asistencia.
3. Luz de control (MIL) en amarillo: Houston, tenemos un problema
Esta luz de control tiene dos variantes: una en la que parpadea y otro en la que está fija. Muchos pasan por alto esta diferencia, pese a que parezca mínima puede suponer dos fallos importantes y diferentes.
Si la luz se encuentra fija significará, la gran mayoría de veces, que el coche tiene problemas de emisión. Ahora bien, esa luz de control amarilla empieza a parpadear significa que el modo de emergencia está activado. Independientemente de cual sea el caso, lo mejor será estacionar y revisar el manual.
4. Si tu motor no arranca y hay una luz encendida con el símbolo de coche y llave está sería la razón
A esta luz se le conoce como inmovilizador (WSF) e indica un problema en el sistema de seguridad del vehículo, lo cual impide que el motor arranque. La mejor recomendación en estos casos es intentar arrancar el coche con otra llave. En el caso de que el problema persistiera, deberás presentar tu coche en el taller con el código de error a mano, para que no se realice un diagnóstico erróneo.
5. Luz de advertencia de presión de los neumáticos
Los conductores se suelen preocupar de forma innecesaria cuando esta luz se enciende si has cambiado los neumáticos recientemente. La razón de que esto ocurra es que cuando los cambias se puede llegar a olvidar resetear el sensor de presión.
Sin embargo, no debes pasarla por alto, porque puede tratarse de un verdadero fallo en la presión, lo cual podría provocar un desgaste desigual de los neumáticos y aumentar el riesgo de accidentes.