Todo esto es lo que debes vigilar en tu coche si tiene más de 10 años

Que los años no afecten a la seguridad:

• Elementos de seguridad como el cinturón: los cinturones son un elemento que usamos a diario y pueden deteriorarse fácilmente. El sistema de recogida puede fallar e incluso el cinturón se puede deshilachar. De forma parecida, los airbags se deterioran con el tiempo y es bueno revisarlos, porque en caso de accidente son esenciales.
• Sistema de dirección: el sistema de dirección es otra de las partes de un coche que con los años puede dar problemas. Por ejemplo, el volante se volverá más duro a la hora de girarlo o incluso surjan vibraciones.
• Correa de distribución o cadena: las correas de distribución pueden alcanzar los 10 años de vida útil, pero siempre será más recomendable seguir las indicaciones de los fabricantes. Por otra parte, si tu coche usa cadena pueden aparecer holguras, por lo que si se mantiene una correcta revisión de la cadena podría durarte toda la vida útil del coche.
• Alternador: la vida útil es superior a los 200.000 kilómetros, aunque depende de las condiciones de uso. No obstante, en general se encenderá el testigo del coche cuando haya algún problema en la batería o relacionado.
• Motor de arranque: es un motor eléctrico cuyo objetivo es poner en marcha el motor del vehículo. Por lo tanto, si el coche no arranca al girar la llave de contacto, puede deberse a que el motor de arranque está defectuoso.
• Amortiguadores: es un elemento que interfiere directamente con el comportamiento de los frenos, la estabilidad y la dirección. Se recomienda cambiarlos después de los 80.000 km y antes de los 90.000. Además, lo aconsejable es hacerlo por parejas, es decir, cambiar a la vez los amortiguadores delanteros o traseros, pero no de uno en uno.
• Embragues: los años hacen mella en los discos y si tu coche patina al salir o el embrague tiene mucho recorrido, son señales de que este elemento está desgastado.
• Óxidos: con el paso del tiempo es normal que algunas partes del vehículo se oxiden, sobre todo si la gran mayoría del tiempo tu coche lo ha pasado en zonas húmedas. No obstante, la lluvia también puede afectar a zonas como los elevalunas. También tendrás que revisar las vigas del chasis, el sistema de escape, los pasos de rueda, la suspensión, los puntos de unión, etc.
• Soporte/ tacos de motor: ofrecen un gran confort en el coche, ya que se encargan de absorber vibraciones producidas por el propio motor. Si no los cambias o revisas a fondo, pueden producir averías como rotura de los anclajes del motor.
• Inyectores: se tratan de una pieza que se necesita cambiarlos, por norma general, pero si que es muy recomendable limpiarlos cada cierto tiempo. Los años hacen que se acumule suciedad y se obstruyan los orificios, lo cual puede general mayor consumo del coche.
• Carbonilla: la carbonilla se puede acumular en el motor con el paso de los años si no se limpia con cierta frecuencia. Por ello, en estos casos se recomienda hacer una descarbonización del motor, aunque deberás conocer todos los aspectos de esta práctica.

Revisar tu coche cada cierto tiempo será clave para localizar averías y no correr ningún peligro | Freepik