Cupra: La pasión española por el motor convertida marca
Cupra ha pasado de ser una división deportiva dentro de Seat a una marca internacional, en apenas una década
Cupra es una marca joven, que representa las nuevas tendencias del motor y la pasión por la deportividad y el automovilismo. Pese a ello, sus raíces son tan profundas como las de la Sociedad Españolas de Automóviles Turismo (SEAT) nacida en 1950. Es imposible entender el espíritu de Cupra, sin conocer la historia de Seat.
El nombre Cupra proviene de la fusión de las palabras “Cup Racing”, y refleja la herencia competitiva de Seat en las carreteras y los circuitos de todo el mundo. Desde sus inicios en el mundo del automovilismo, la firma española ya destacaba con modelos de alto rendimiento, de modo que las versiones más deportivas de icónicos modelos como como el Ibiza y León acogieron el apellido ‘Cupra’.
Cupra no solo era un sello deportivo dentro de Seat; representaba una filosofía que combinaba diseño, tecnología y una actitud que fusionaba elegancia y rendimiento. “No es solo un coche, es una declaración de intenciones”, rezaba uno de sus primeros eslóganes.
Identidad Propia
La creación de Cupra como marca en 2018 supuso el lanzamiento de un concepto nuevo dentro de la industria automovilística. Mientras Seat seguía siendo la marca accesible y funcional para el día a día, Cupra se posicionaba como una opción para aquellos que buscaban exclusividad y diferenciación, pero sin las pretensiones de una marca premium. La idea era clara: ofrecer a todo el mundo vehículos que combinasen prestaciones deportivas con un diseño rompedor.
Uno de los primeros modelos que lanzó la marca fue el Cupra Ateca, un SUV que fusionaba la practicidad de un coche familiar con un motor de altas prestaciones, capaz de entregar 300 CV. Tras él, llegaron el Cupra León y el innovador Cupra Formentor, el primer vehículo diseñado exclusivamente por Cupra, consolidando su independencia total de Seat y marcando un antes y un después para la marca.
El Cupra Formentor fue todo un éxito comercial y de crítica. Su diseño agresivo, líneas angulosas y una motorización que llegaba hasta los 333 CV hicieron de él un referente en el segmento de los SUV deportivos, compitiendo de tú a tú con marcas premium consolidadas como BMW, Mercedes y Audi.
Más que velocidad
La visión de Cupra no se limita a la velocidad o la potencia bruta. Desde sus inicios, ha apostado por una experiencia de conducción integral, donde la innovación, la tecnología y el diseño juegan papeles fundamentales. Con líneas agresivas y un enfoque claro hacia la estética y el detalle, Cupra ha desarrollado una identidad propia garcias a una puesta a punto magistral del chasis en todos sus modelos.
En el interior, los vehículos no solo ofrecen materiales premium, como el cuero o los acabados en aluminio, sino también tecnología punta, con sistemas de infoentretenimiento avanzados, pantallas de alta resolución y asistentes de conducción que colocan a la marca a la vanguardia del sector.
De España para el mundo
Aunque Cupra ha logrado una gran presencia internacional, es imposible entender su esencia sin hacer referencia a sus raíces españolas. Con sede en Martorell, cerca de Barcelona, Cupra refleja el carácter mediterráneo. Al igual que Seat, Cupra representa lo mejor del diseño e ingeniería española, pero con un enfoque global.
Uno de los ejemplos más claros de su éxito a nivel internacional es su expansión en mercados clave como Alemania, Reino Unido y México, donde la marca ha experimentado un crecimiento significativo en ventas, especialmente con el Cupra Formentor.
En sus seis años de vida, Cupra ya ha superado las 650.000 ventas, batiendo su propio récord en el pasado ejercicio 2023 con 230.739 entregas, lo que supone un 50,9% más que en 2022 (152.896) y el 44% de las ventas totales del Grupo Seat.
Electrificación y expansión
Cupra no es ajena a las tendencias del mercado. Con el Cupra Born, su primer vehículo 100% eléctrico, la marca ha demostrado que es posible combinar sostenibilidad y rendimiento sin sacrificar el carácter deportivo que la define. El Born, con una autonomía de hasta 540 km en su versión más avanzada, ha sido un éxito desde su lanzamiento, logrando posicionarse como uno de los eléctricos más atractivos del mercado.
Además, la marca tiene planes ambiciosos para el futuro cercano. Con la llegada de nuevos modelos como el Cupra Terramar o Tavascan, un SUV coupé eléctrico que promete revolucionar el segmento, y una versión más avanzada del Cupra León, se espera que la marca siga consolidando su presencia global, con especial enfoque en el crecimiento de sus vehículos eléctricos e híbridos.
En menos de una década, Cupra ha pasado de ser una división deportiva dentro de Seat a convertirse en una marca independiente con una identidad sólida, marcada por la innovación, el diseño y el rendimiento. Pero su éxito no reside solo en sus coches, sino en la comunidad de conductores que han abrazado su filosofía y que la propia marca describe como ‘tribu’. Con cada nuevo modelo, Cupra sigue demostrando que no se trata solo de velocidad, sino de una forma de vida.