¿Qué moto es más cara de asegurar?

A menudo, cuando hablamos del precio de una moto, o de un coche, olvidamos que el coste por su adquisición no es el único a sumar en las cuentas finales. En el caso de las dos ruedas, el equipamiento del motorista es un extra significativo al necesitar casco, guantes, ropa específica y elementos de seguridad como espaldera e incluso airbag. Unos accesorios a los que deberemos añadir una póliza de seguro obligatoria, que nos cubrirá en caso de accidente y protegerá a los posibles afectados por el mismo. En función del modelo elegido, su precio medio puede superar los 800 euros, una inversión a tener muy en cuenta.

Más aún tras el aumento del coste de vida, que también repercute en el mantenimiento de la máquina y la elección de tu póliza ideal. Tal como comenta Antonio Rubio, responsable de seguros de moto de Rastreator: “a pesar de que la mayoría de españoles (68%) elijan su seguro basándose en las coberturas y servicios que ofrece la aseguradora, el 57% lo hace fijándose en el precio como prioridad”. Este detalle hace que muchos conductores salten de un seguro a otro, olvidándose de la importancia de las coberturas que, en caso de incidente, terminan por ser lo más importante de un seguro.

El mismo comparador de seguros ha estudiado el mercado de las pólizas para crear un ranking de las motos más caras y baratas de asegurar en 2023. Para ello, han estudiado la prima media de todos los modelos registrados en Rastreator y se ha detectado que, en función de esta decisión, el precio anual puede variar hasta un 82%.

Los condicionantes para que una póliza sea más, o menos, cara son muchos, empezando por el coste de reparación, las piezas de recambio o el índice de siniestralidad de dicho modelo. No es de extrañar, entonces, que las motos de media cilindrada o seiscientos y deportivas sean las que ocupan la gran mayoría de posiciones en el ranking.

La primera es la Honda CBR 650, con un coste medio de 861 euros, seguida de la Aprilia RS 660 con 836 euros de prima anual y la Kawasaki Ninja 650 con 821 euros cierra el podio de las más caras. La Honda CBR 500 (778 euros) es la cuarta y como quinto modelo se cuela la primera mil: la Yamaha YZF R1 (673 euros). Le sigue otra de las deportivas más prestacionales del mercado, la Honda CBR 1000 con 658 euros de media.

Completan el ranking la Kawasaki Z 650 (651 euros), Suzuki GSXR 600 (649 euros), Yamaha YZF R6 (634 euros) y por último, la Yamaha MT 07 (606 euros). A la lógica de la siniestralidad, por ser modelos de acceso a la deportividad en motocicleta, se le suma que sus propietarios suelen contratar los seguros más completos, claves para afrontar alguna posible reparación.

Los modelos urbanitas, en cambio, son los más económicos. Pese a tener un índice de siniestralidad nada bajo, esta tipología de motocicleta es más económica de reparar y, por ende, de asegurar. Además, suelen contar con pólizas a terceros con asistencia, por lo que su coste medio se reduce considerablemente sobre los 220 euros.

La décima motocicleta más barata de asegurar es la Peugeot Geopolis 250 (226 euros), seguida de la Piaggio Vespa X8 (226 euros) y la Yamaha Neos 50 (225 euros). Otro scooter “viejo” se cuela en séptima posición: la Yamaha CYGNUS 125 (224 euros) y le sigue el KYMCO Vitality (222 euros). El top 5 de modelos más baratos lo arranca la Piaggio Vespa 50 (219 euros) y se coloca cuarta la Yamaha SR 250 (209 euros).

Los modelos más baratos para una póliza de seguros son: el Daelim Daystar (204 euros) en tercera posición, la Piaggo Vespa 200 (174 euros) como segundo scooter más barato y, por último, la más económica, la clásica Piaggio Vespa Vespino (153 euros).