El Volvo EX90 representa el camino que ha tomado la automoción basando su propuesta de valor en la tecnología, la sostenibilidad y la seguridad por encima de todo.
Una serie de sensores detectarán hasta el más mínimo movimiento dentro del habitáculo para detectar si quedan ocupantes en el coche y mantener activada la climatización.
El futuro EX90 dispondrá de un sensor lidar capaz de crear imágenes precisas de los alrededores del coche y de detectar un peatón a 250 metros a velocidades altas.
La marca sueca confirma que ha iniciado los trámites para levantar las instalaciones, que producirán baterías para camiones y vehículos pesados, en la localidad de Mariestad.
Volvo vio como en 2020 se redujo su beneficio neto un 18,9% hasta los 768,7 millones de euros y su beneficio operativo hacía lo propio un 40,5% hasta los 836,2 millones de euros